En Karate únicamente se utilizan, para defender y golpear, las armas naturales que ofrece el cuerpo humano, fundamentalmente manos, brazos, pies y piernas.
« Desde la cabeza hasta las yemas de los dedos, hay un
sorprendente número de partes del cuerpo que pueden ser empleadas en Karate.
[...] De hecho, puede decirse que el cuerpo humano está cubierto de armas
naturales. No es necesario decir que para emplearlas eficazmente uno debe
entrenar con asiduidad. »
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